jueves, septiembre 21, 2006

Cyrana de Histerac II

Avelino no nació con la mejor estrella que digamos. Varias hermanas mujeres y una madre solícita hicieron de él un esclavo gustoso que hace la compra de supermercado familiar y, entre otras tareas destacadas, ordena las cosas que las chicas dejan por ahí, protestando por la indiferencia sistemática mientras ellas, con quejidos desganados, se liman las uñas.
Esta escriba atinó, más de una vez, a sugerirle que las mandara a todas a un lugar muy bello, frondoso y acogedor, pero él se niega sistemáticamente… o cambia de tema, la estrategia princeps de un obsesivo hecho y derecho.
No hay nada que me enoje más que las féminas destraten a mi querido Avelino.
El entrenamiento está costando sudor, lágrimas y empachos de pizza con Dr. Love, pero lo estoy logrando. Consta de varios pasos:
a) Lecturas del sagrado libro de las citas, con intepretación y análisis sintáctico
b) Salidas de copas con los amigos de Dr. Love
c) Role playing sobre el “top ten” de situaciones problemáticas luego de la primera cita.
Ya cuento con un staff de maestros que se prestaron a trabajar ad honorem por la causa. Amigos de Dr. Love, por supuesto. Dany dará cátedra sobre “Cómo ligar en supermercados y bondis. Guía práctica del hombre de mundo” y Tony trabajará sobre su especialidad “Abogadas y psicólogas, el oscuro arte de descifrar el camino del deseo...o no”.
Avelino saldrá un seductor de esta tanda…o me retiro de mis artes amorosas de Cyrana de una vez y para siempre.
Como le sugerí y encomendé, Ave decidió enviar el mail con la propuesta de sorpresa para la Garza Rubia. La muchacha le contestó, por la misma vía, que la llamara. Ave marcó las teclas de su número una y otra vez durante toda la semana, pero esos botoncitos iluminados y calientes, sería lo único que mi amigo tocaría. La chica le bloqueó la entrada, era un dato obvio, según las precisiones técnicas de mi asistente amatorio, Dr. Love.
Así, llegó el viernes sin noticias de la Garza, pero Avelino iba por más. Esa misma tarde recibí un mail con una carta que decía algo así como: “Querida Garza Rubia: Oye, dime si está todo bien conmigo, si te intereso…Te he llamado varios días sin respuesta, si no quieres saber nada me lo haces saber, ok?. Besos”. Un espasmo estomacal me dobló en dos, tomé el libro de las Cien citas golpeándolo una y otra vez contra el diván, Freud me sonreía desde sus espejuelos redondos, sarcástico. Recordé la famosa pregunta que lo llevaría a una investigación sin par “¿Qué quieren las mujeres?”
“-Mi amado Sigmund- , le contesté a la foto, “-que ustedes se sigan preguntando qué queremos…”
Tomé aire y recordé que el libro precisa claras medidas contra los “Actings” luego de una primera cita en Histerac. Nada de apurar ni tratar de lograr definiciones del vínculo fuera de timing. Después de todo ¿quién era Avelino para reclamar en ese momento? un mero aspirante a la corte de la Garza Rubia, nada más…Horrorizada le iba a contestar el mail tratando de impedir semejante acción que podría tirar todo el trabajo por la borda, pero luego pensé que no. Que Avelino tenía que probar su propio estilo alguna vez...
La Garza Rubia jamás respondió a la misiva inquisitoria.
-Estuviste re mal, Ave…Con ese mail…
-¿Te parece?
-Y sí, totalmente fuera de tiempo lógico, no sos su novio para reclamar, sólo tuvieron un encuentro…
-Pero ya no entiendo, niña, la invito, me dice que la llame, la llamo, no aparece…¡Me vuelvo loco!
-El libro de las Cien citas al hilo llama a esta actitud “El colibrí venenoso” Aquellos que se acercan pero no del todo, actitudes evasivas, confusas, contradictorias…
-¡Pero ella me mandó sus fotos!
- Es el comienzo del camino hacia la idolatría… Lo dice el libro en el capítulo X “Fotos no son promesa”…a ver…acá; “Si usted recibe fotos luego de la primera cita, ésto…y grábelo bien en su cabecita…NO SIGNIFICA NADA…En el 5% de los casos ha resultado una buena señal…Le recomendamos no centrar su ilusión en dicha acción y fijar la atención en el objetivo…La foto podría resultar un elemento distractor, o un objeto propio de una personalidad narcisista, cosa que a usted no le importa, usted quiere llegar a la cita número cien, no a una colección de bellas imágenes…Si recibiera una foto, agradezca, elogie y prosiga. Citólogos de Noruega afirman que no hay nada peor que ilusionarse con la cuestión especular que ofrece la…”
-¿Y cuál es la solución?
-La paciencia…
-Yo no tengo de eso…
-Lo sé…Ya vas a encontrar una chica Ave, no te preocupes…Esto es ensayo-error…La Garza fue para practicar…
-Ella se lo pierde ¿no?
...

viernes, septiembre 08, 2006

Cyrana de Histerac I

Según las palabras del Avelino mismo, la suerte lo había señalado en el encuentro con La Garza Rubia, su nueva conquista on-line. Parece que la cita había dado frutos: motivación-estímulo-respuesta, Pavlov un poroto... La Garza Rubia había solicitado con voz edulcorada con aspartamo un nuevo encuentro, pero Avelino hizo todo mal. Su libro sobre las féminas no especificaba algunas cuestiones que el mío, "Cien citas al hilo", describía con exhaustividad.
Luego de esa primera cita Avelino había vuelto a conectarse con La Garza Rubia, mediante messenger, unos días más tarde y en un acto de deferencia y entrega total, según describió, había recordado su cumpleaños, primero con un mensaje de texto y luego con un mensaje en su contestador. Ella ya le había soltado el Mantra más temido: "¡Sorpréndeme!". Avelino, desconcertado, me explicó que sorprenderla fue llamarla por su onomástico.
-¡Hay querido! ¡No sabés nada!
-Bueno, niña, yo creí que sorprenderla era eso...También puedo sorprenderla con cine y cena...
-¡Cine y cena! Estás loco Ave, enfocá en lo que te está pidiendo La Garza...Sor-pre-sa...Mi libro dice, y cito textual, "A partir de una primera cita exitosa todo podría andar sobre ruedas a menos que (como especificamos en el punto 4 inciso 5, página 156) surja como consecuencia de la misma el pedido de la famosa Sorpresa. Este podría ser esgrimido sobre la vertiente "¡Quiero que me sorprendas!" (excluyendo algunas uniones que superan los diez los diez años en que se pronuncia "¡Ya no me sorprendes!", que trataremos en el capítulo XX) Normalmente esto es considerado como una señal de alarma, pero bien llevado, existen un 50% de probabilidades de torcer la tendencia mencionada..."
-Bueno, yo que sé...Vera...No entiendo nada....Me parece que hice algo mal...¡Ya sé! El libro de las féminas decía que la primera cita no debe prolongarse más allá de los 45 minutos ¡Y estuvimos tres horas y media charlando!
-Sí, supongo que por el tema del deseo...Pero ¡Tirá ese libro de una buena vez!...Manos a la obra con "la sorpresa". Vos me dijiste que es pintora...Acarreá su espigada figura a una exposición de escenografía, o algo así, y después a cenar a un lugar medio under, eso, my dear friend, es una sorpresa...Sondeá en sus intereses y planificá a partir de ahí...
-Ya me lo dijiste la otra vez, busqué en todos lados y no hay una mísera exposición...
-No creo...¡Ah!¡Ya sé! ¡El lugar de la otra vez! ¡Ese donde cuentan historias! ...
-Habría que ver qué argumentos tienen las historias...
-Dejate de joder, si querés fijate si el empedrado por donde caminará es defectuoso o diseñale un tobogán para que su culo caiga directo en la silla...¡No podés!
-Bueno, pero yo ya la llamé para el cumpleaños, listo, ahora ella no me está llamando...
-Ay nene, tenés todos los cuadros cambiados...Ahora te toca a vos proponer algo...¿Recuerdas?...Te cacheteó con el guante de la Sorpresa, y tenés que responder...
-¡Ya la llamé el sábado y no estaba!
-¡No! ¿El sábado? ¿Cómo no me lo dijiste antes?...¿Para salir?
-Sí, creo...
-Mi libro de cabecera, que estoy segura que es mejor que ese otro, se refiere a varios citólogos en el tema de la llamada de sábado, es más, la bautizaron "El aullido del buey deshauciado". Para programar un posible encuentro deberás hacerlo desde el lunes o martes, miércoles es jugado, jueves y viernes, tendrías que ser Brad Pitt en celo para que te diga que sí...
-Ah, no sabía...
-Me extraña que no estés al tanto de semejante oráculo...
-¿Y qué cuernos hago ahora?
-Tomás el desafío, eso hacés. Le escribís mañana martes un mail que diga que pensaste la sorpresa y que ya tenés el lugar, es en Palermo, a las 21 hrs del viernes, que te conteste si acepta...Si no acepta, y bueno, confirmado, pasarás a otra cosa...
-Es un trato...mañana le escribo...

viernes, septiembre 01, 2006

Los Vulnerables

Ya les conté que hace tiempo soy admitida en las reuniones de amigOs de Dr. Love (A.K.A "Los vulnerables") y bueno, el secreto es escuchar bastante (nada que no se pueda lograr con ejercicios de por medio).
La mayor parte del tiempo pelean, se gastan, rememoran, gritan, golpean mi mesa querida de vidrio y piden más cerveza. Cada velada uno de ellos es tomado de punto: esta vez se la agarraron con Dr. Love, aquellas épocas en que iban a ese bar y a él le gustaba esa moza ( y dále con esa moza). Entonces la invitó quichicientas veces con corte de rostro múltiple y parejito incluído. Lo retaban porque siempre los obligaba a dejarle propinas monstruosas por culpa de esa obnubilación no correspondida.

Kata semanal

“We all like to think that we have so much control over our own lives and of our destinies...You always hear people saying, ‘I make my own luck.’ We think if we work hard we will succeed and, yes, hard work is important. But people are afraid to admit how contingent their lives are on chance and luck.”
Woody Allen, sobre la película "Match Point" .
Traducción (posible):" A todos nos gusta pensar que tenemos tanto control sobre nuestras propias vidas y sobre nuestros destinos...Siempre se escucha a la gente diciendo " Yo hago mi propia suerte". Pensamos que si trabajamos duro triunfaremos y, sí, el trabajo arduo es importante. Pero la gente tiene miedo de admitir lo contingente de sus vidas, dependientes de las oportunidades y de la suerte"